Curvas peligrosas
El hayedo de Belaustegui es un lugar mágico que sorprende en cada rincón. En este caso el árbol retorcido y la pequeña caída de agua hacen que se mezclen dos facetas muy perseguidas por nosotros los fotógrafos: las largas exposiciones que convierten el agua en seda y el bosque con esos verdes intensos. Espero que os guste.